Resumen de la
carta dirigida al Banco Mundial y al Fondo Monerario Internacional
Washington, 16
octubre 2000
LA MARCHA MUNDIAL
DE LAS MUJERES SE REÚNE CON EL PRESIDENTE DEL BANCO MUNDIAL Y EL DIRECTOR
GENERAL DEL FONDO MONETARIO INTERNACIONAL
PARA DEJARLE UN ÚNICO
MENSAJE: ¡2000 BUENAS RAZONES PARA CAMBIAR DE RUMBO!
Respaldada por la
movilización de millones de mujeres del mundo entero, la Delegación
Internacional de la Marcha Mundial de las Mujeres en el Año 200 se reunirá, el
16 de este mes, con el presidente del Banco Mundial, el señor M. Wolfensohn, y
el director general del Fondo Monetario Internacional, señor M.Khöler.
La Marcha Mundial
de las Mujeres de común acuerdo con múltiples movimientos internacionales
denuncia los impactos de la mundialización económica actual sobre la mayoría de
la población del planeta. La Marcha denuncia en particular el aumento sin
precedentes de la pobreza mundial, especialmente la de las mujeres, así como la
violencia hacia las mujeres.
Nosotras
afirmamos que las grandes orientaciones políticas y económicas del FMI y del BM
crean desorden en el mundo y constituyen obstáculos importantes para el
ejercicio de los derechos humanos fundamentales de las mujeres.
Las delegadas de
la Marcha Mundial expondrán, a raíz de sus propias experiencias, de que manera
las políticas del FMI y del BM contribuyen al desorden actual y afectan
principalmente a las mujeres. De hecho, son las mujeres que pagan más caro la
mundialización neoliberal actual; son ellas las que sufren más específicamente
las consecuencias de la deuda y de los programas de ajuste estructural. Son las
mujeres las que asumen, por medio de su trabajo no remunerado, el impacto de
las privatizaciones y de los recortes de presupuesto por parte de los Estados
en los sectores clave como la educación, la salud, la protección social, la
ayuda alimentaria, etc. Son ellas las que trabajan en las zonas francas donde
las condiciones salariales y laborales se asemejan a una verdadera esclavitud.
La precariedad de las condiciones económicas en las que viven las mujeres
acentúan su vulnerabilidad a todas formas de violencias. Son a ellas que se
reclutan - y en particular a las niñas - para el turismo sexual, el tráfico de
mujeres y la prostitución. Son ellas las que son las más pobres entre los
pobres.
Un mensaje único
para el BM y el FMI: ¡cambiar de rumbo!
La Marcha Mundial
de las Mujeres pretende interpelar y cuestionar a los responsables del FMI y el
BM sobre los fundamentos políticos y económicos de los programas y proyectos de
éstos, a saber, la fe en el capitalismo neoliberal como única vía de
crecimiento, sin dejar espacio alguno para la diversidad o el pluralismo en los
modelos de desarrollo. Las delegadas demostrarán con insistencia también de qué
manera el mantenimiento del patriarcado influye las políticas de estas
instituciones.
¡Pero
entendámonos bien! No nos oponemos a la mundialización, todo lo contrario;
deseamos una mundialización en torno a una distribución equitativa de la
riqueza mundial entre los países y las personas, en torno a la igualdad entre
mujeres y hombres, en torno al respeto de las culturas, de las diferencias y
del medio ambiente.
Los millones de
mujeres de la Marcha Mundial exigen no sólo ajustes estructurales pero
transformaciones estructurales..
Podría surgir un
proyecto de sociedad nueva (a escala local, regional, nacional e internacional)
a raíz de las experiencias de lucha de las mujeres y de los movimientos
ciudadanos; a raíz de los logros de la comunidad internacional, sobre todos los
alcanzados con las declaraciones, convenios y protocolos sobre el respeto de
los derechos humanos fundamentales, los cuales deberán ser ratificados y
aplicados efectivamente; y finalmente, este proyecto podría también surgir a
raíz de las propuestas innovadoras y de las alternativas que ya han sido
probadas para combatir la pobreza y eliminar la violencia hacia las mujeres..
La Marcha Mundial
de las Mujeres, mediante esta inmensa red internacional que mancomuna las
luchas de las mujeres del mundo y que ya está en acción, aporta aquí su
contribución concreta a la construcción de una nueva arquitectura mundial.
La pobreza y la
violencia hacia las mujeres no constituyen fenómenos naturales; se trata de
fenómenos de construcción política, económica, cultural y social. Nos
corresponde entonces a nosotras las mujeres eliminarlas de los frentes
político, económico, cultural y social.
Apremia explorar
nuevas vías, distintas a las emprendidas por estas instituciones que mantienen
y exacerban las desigualdades y las violencias hacia las mujeres.
Hemos venido a
encontrarnos con los que toman las decisiones de estas instituciones
financieras para informarles que estamos decididas, por la fuerza de nuestra movilización
mundial y nuestras marchas en las calles de las ciudades y aldeas de nuestros
países, a cambiar las cosas.
¡Y no hemos
venido solas! Movimientos internacionales que desde hace varios años están a la
búsqueda de alternativas, factibles y eficaces, en un contexto puntuado por la
tenacidad y la determinación, se unen hoy al movimiento de las mujeres. Juntos
impugnan el sistema de la mundialización económica actual y reivindican cambios
estructurales sustanciales con miras a otra mundialización, una mundialización
de la solidaridad y de la igualdad.
La Marcha Mundial
de las Mujeres exige del Banco Mundial y del FMI:
·
La
transparencia e la imputabilidad de las instituciones financieras
internacionales.
·
La integración y la aplicación de la dimensión
de "género " en las políticas macroeconómicas.
·
El
incremento de los recursos financieros para las mujeres.
·
Una
anulación de la deuda de todos los países del Tercer Mundo que tenga en cuenta
los principios de responsabilidad, transparencia de la información e
imputabilidad.
·
El fin de
los programas de ajuste estructural o de sus semejantes.
Manifestamos
nuestra determinación de resistir pacíficamente a las políticas conducidas por
las instituciones financieras internacionales. Estaremos en todas partes para
denunciar, exigir, evaluar, proponer.