de K. Marx & F. Engels
Manifiesto del Partido Comunista
(1847)
A los comunistas se nos reprocha también que queramos abolir la patria,
la nacionalidad.
Los
trabajadores no tienen patria. Mal se les puede quitar lo que no
tienen. No obstante, siendo la mira inmediata del proletariado la
conquista del Poder político, su exaltación a clase nacional, a nación, es
evidente que también en él reside un sentido nacional, aunque ese sentido no coincida
ni mucho menos con el de la burguesía.
Ya el
propio desarrollo de la burguesía, el librecambio, el mercado mundial, la
uniformidad reinante en la producción industrial, con las condiciones de vida
que engendra, se encargan de borrar más y más las diferencias y antagonismos
nacionales.
El
triunfo del proletariado acabará de hacerlos desaparecer. La acción
conjunta de los proletarios, a lo menos en las naciones civilizadas, es una de
las condiciones primordiales de su emancipación.